Hoy entrevistamos a Aleix Palau @apalaut , Jefe de Redacción de la Revista de música clásica Melómano.

¿Cuándo comenzaste a trabajar con Social Media?

– Empecé a trabajar con el Social Media hace unos 8-9 años. Cuando el mundillo éste empezaba a sonar fuerte con plataformas como Messenger y Hi5.

¿Cómo afectó este cambio a tu vida cotidiana?

– Mi vida cotidiana ha cambiado por completo, sobre todo desde que se desarrolló Facebook o, en su momento, Tuenti. El hecho de compartir comentarios e imágenes en las redes llega incluso a cambiar los hábitos de actuación de uno mismo. Si estás con tus amigos, haces fotos “para colgarlas en Facebook”. Si sigues una tendencia o a una persona es “porque está en Twitter”. Esto que puede sonar tan genérico es una realidad que está haciendo evolucionar a todos, aunque muchos no se den cuenta.

Ya con Twitter, el hecho de poder vivir la inmediatez con el resto del planeta es algo que ha alterado todavía más mis hábitos. En muchas ocasiones los trend topics determinan el orden en que busco información o mis preferencias a la hora de poner algún comentario. La gente mira lo que hacen los demás para comentarlo y retuitearlo. Todo es como un escaparate al que estamos expuestos y desde el que queremos que los demás vean qué hacemos y dónde estamos. Todos queremos ser el foco de algo… Y yo no soy ninguna excepción, mal que me pese.

En un sector tan especializado como el que trabajas tú, la música clásica y, en concreto, la ópera, te han servido las redes sociales para promocionar tu marca?

– Sí. Soy usuario principalmente de Twitter y, en mi caso, el hecho de estar en esta RS me ha permitido entrar en contacto con muchas entidades y personalidades del mundo operístico y musical. Mis críticas, cuando se publican, aparecen en Twitter. Esto ayuda a que se difundan de una forma muy rápida y a que la gente acceda a ellas fácilmente. Obviamente, este hecho me proporciona notoriedad y visibilidad.

Los principales teatros de ópera y auditorios tienen sus perfiles en Facebook y Twitter e interactúan con las personas. Aparte ello lo aprovechan para dar a conocer sus novedades, programaciones, etc.

Por otro lado, hay una fuerte oleada de gente joven, sobre todo en España, que se interesa por la clásica. Estos tienen blogs y se siguen todos entre ellos mediante las Redes Sociales, fomentando una comunidad bastante fuerte en torno a este campo.

¿Cuál es tu mayor experiencia laboral 2.0?

– Mi mayor experiencia fue poder seguir en directo desde Roma el viaje apostólico del papa Benedicto XVI a México y Cuba. Ahí pude ver la verdadera fuerza de las redes y la gran capacidad de movilización e interacción que podemos tener desde el sillón de nuestra casa.

 ¿Qué 5 apps utilizas a diario?

– Whatsapp, Viber, Spotify, Skype, Twitter.

¿Qué crees que falta en el mundo 2.0?

– En el mundo 2.0 falta una regulación que permita separar información profesional e información amateur. La información es una arma muy poderosa que no podemos dar a todo el mundo. De ahí a que en las redes se extiendan regularmente bulos que resultan ser mentira y pueden llegar a ser muy dañinos.

¿Cuántas horas dedicas al día a las redes sociales? ¿En qué redes sociales estás presente?

– Gracias a mi smartphone estoy todo el día conectado a las redes. Utilizo principalmente Twitter, aunque también tengo Facebook, que me parece ya una arma obsoleta.

Anécdota 2.0

– No hay mayor anécdota en el mundo 2.0 que formar parte de algo que es tan real como ficticio.